lunes, 14 de marzo de 2016

Inicio de Vida



Ella es joven todavía, apenas tiene mil millones de años. Lo sigue siendo, pero en aquel momento no era consciente de los cambios que Vida había de producir en Ella. Permitía, inconsciente, que en ella misma conviviera el veneno y la esperanza, ah, ¡La esperanza!, ¡Cuan diferente hubiera sido el presente, tres mil quinientos millones de años después, si ella no hubiera recibido con un gesto maternal a esas conciencias que pugnaban en una guerra que nunca tuvieron posibilidad de ganar y, sin embargo, ganaron. Frutos aniñados de las más antiguas explosiones, fueron ardiente gas, emocionante luz y preciosa estrella, tras eones disfrutando de la eternidad repitieron el ciclo, aburridos de la inmensidad y esperando crear un Universo diferente en el que disfrutar sus existencias. Lo consiguieron, se dividieron y se unieron, se mezclaron y surgieron de nuevo. Al fin, le dieron forma a Ella y Ella les acogió, pero no solo a ellos, también a la vida que traían, pues este era su nuevo juego y su nueva forma de existir, ¿qué hacer – pensaron las conciencias de estos niños traviesos – si nos añadimos electricidad, si buscamos un propósito que nos perpetúe? Pero no llegaron solos, la lucha fue ardua y el destino que les aguardaba difícil de concebir en aquel momento…

         - Son pocos los lugares que puedo visitar, en qué estaríamos pensando al animar nuestra existencia, dejar de ser polvo y convertirnos en polvo en movimiento. Antes no sabía de mi mismo pero estaba, volaba y seguro que viajaba, nos hemos confinado a nosotros mismos en este sitio tan violento, tan denso y pesado y a la vez tan volátil en su superficie… ¡Justo donde estoy!

Era ese haz infantil, que decidió ser Vida, atribulado en su existencia el primero que luchó y fue, pero hubo otros que, sin saber muy bien como, fueron perpetuándose a un ritmo tan lento que ni las estrellas comprendían por qué deseaban continuar así, más su conciencia era fuerte y su determinación férrea, quizá influjo del alma de Ella.

     -  Somos y, sin embargo, no acabamos lograr ser ¿No os sentís acaso impotentes en estas esquinas que logramos domesticar?
       -El enemigo que tenemos, que nos roba y hace de nuestra necesidad su aliada no permite que salgamos y, ya lo veis, quizá nos prefiere junto con Ella confinados aquí…
          -Me niego a creerlo, me niego a aceptarlo. Como sabemos, hemos viajado y vivido mucho tiempo a lo largo del espacio, hemos sido muchas formas, ¿Por qué aceptar que esta forma que hemos creado no tiene hueco en nuestro Universo?
-      - ¡Nosotros somos Universo! ¡Él nos dijo que existiéramos! ¿Cómo disfrutar de lo que Él nos prometió sin adaptarlo a nosotros?

Esas conciencias, esas primeras existencias dotadas de vida, vivían atormentadas y envidiosas de sus inertes hermanos, más su tenacidad fue recompensada. Tras eones de penurias una de ellas, una más brillante o más fuerte, quizá ambas cosas se alzó y pronunció el primer ¡Eureka! de la vida…

        -¡Sigamos existiendo! ¡Miradme!
         - ¡Eres enemigo…!
-        ¡No y mil veces no! He domado al enemigo, he descubierto que no es nuestro rival, que necesitaba de nuestra necesidad para seguir existiendo, pero le he mostrado un nuevo lugar donde vivir… ¡En mi mismo! Él me hace crecer y yo a cambio separo la garantía de nuestra vida para que sigamos viviendo y podamos existir en mayor número. Los que son como él seguirán llegando, pero ahora sabemos cómo recibirles.

Poco imaginarían esas conciencias, quizá latentes o quizá tan vivas como tú, lector o lectora, que serían pensadas y estudiadas millones de años después. Tantos años que daña imaginarlo. Pero así es, no solo estudiadas si no adoradas, respetadas y veneradas por ti o por mí. No solo inventaron la vida para seguir existiendo, si no que descubrieron que era un medio peligroso para hacerlo, pero también descubrieron cómo seguir haciéndolo con mayores garantías. ¿Y de Ella, qué fue? Ella conspiró con el destino para permitir que la vida dibujase sonrisas en forma de atmósfera y cordillera, mar y metal, hielo y fuego, ¡mucho fuego!, Ella fue golpeada por Universo quien, buen padre, ponía a prueba a sus vástagos cada varios millones de años. Le dijo a Sol, guardián de Ella, que vigilara y no permitiera que se relajase, que preparase a Vida para adaptarse a cualquier situación. Y en ese momento las pequeñas conciencias descubrieron algo tan poético como hacer del veneno una virtud: Separaron a Carbono de Oxígeno, le dijeron que se uniera a ellas y creciesen juntos, permitiendo a Oxígeno crear a Ozono, quien trabajó con Ella para que las conciencias pudieran seguir creciendo, muriendo y naciendo, para que pudieran seguir alimentándose y creando tantísima de la magia que hoy disfrutamos en forma de infinidad de materia. Son el diamante que te adorna, son el carbón que impulsó nuestro desarrollo emancipador de las normas que Ella impuso, son el oro y la madera, son lo que nos permite ser como somos. Son simple polvo de estrellas, pero qué maravilloso es eso. Somos lo que fueron y un poco más, somos réplicas de lo que ellos inventaron que pueden pensar en sí mismos, atormentarse y amarse usando la química que ellos idearon de una forma tan magnífica que incluso a veces ni siquiera alcanzamos a entender. Somos maldición y maravilla, tanto es así que Ella, si bien nos ama, nos teme. Nos pretende enseñar y adiestrar para conocer a Universo pero nosotros, inquietos, queremos más y lo queremos más rápido.

Ella, que es Tierra y Gaia, espera que aprendamos y que disfrutemos de Vida, quizá haya llegado el momento de plantearse este escenario, quizá debamos honrar la memoria de esos niños que fuimos y que nos permitieron existir en un presente que dominamos arrogantes y, seamos sinceros, en el que tal y como somos no duraremos mucho más. Llega quizá el momento de agitar la conciencia que nos dio forma tanto tiempo atrás y redefinir valientes a Vida, para que Tierra y Universo vuelvan a sonreír por habernos creado, por ser nosotros y sentir que nosotros somos ellos ya que, en definitiva, fuimos uno mucho atrás.










3 comentarios:

  1. Casi se puede sentir el milagro de Ella... Lo has descrito perfectamente!

    ResponderEliminar
  2. ¡Muchas gracias, me alegra que lo hayas disfrutado!

    ResponderEliminar
  3. Ella palpita, Ella siente, Ella nos seguirá acogiendo en su seno o nos destruirá. Como la amo....

    ResponderEliminar